INTRODUCCIÓN: Texto
Bíblico: Judas 1:17-21
1. ¿Qué hora es en el reloj
del mundo? Debemos conocer el tiempo
en que vivimos, y la Biblia nos dice que el tiempo actual es el último tiempo.
2. ¿Cómo vamos a vivir en el
momento histórico en que vivimos? Se hace
necesario saber más sobre el valor de las verdades para el tiempo en que
vivimos.
3. ¿Cómo ser cristiano, cuando el cristianismo es tela de
juicio? Es necesario saber que
hay peligro en permitir que la influencia del diablo nos distraiga de la verdad
para el tiempo en que vivimos.
I. LA PRUEBA DE QUE ESTAMOS EN EL TIEMPO DEL FIN ES LA
MADURACIÓN DEL PECADO EN LA VIDA DEL SER HUMANO – Judas 1:17-19
1. Con casi 6000 años de
pecado, el mundo y sus habitantes están maduros en el pecado. La gente dejó de
simplemente descreer y empezó a burlarse.
2. Con casi 6.000 años de
historia, el pecado ha revelado su verdadera esencia y sus consecuencias. Los
burladores viven según sus concupiscencias.
3. Con casi 6000 años de vida
en la tierra, está claro para todos que el pecado es destructivo y mortal. El
pecado es como una semilla asesina que nace en el corazón del individuo, que le
destruye la moralidad y la vida:
a) El que vive ajeno a Dios causa riñas, luchas y
divisiones;
b) El que está lejos de Dios es inmoral, inclinado a la
sensualidad, que es el pecado del sexo;
c) El que duda de la Biblia y la cuestiona no tiene el
Espíritu Santo que la inspiró.
II. LA PRUEBA DE QUE ESTAMOS
CERCA DE VER REGRESAR A JESÚS ES LA SITUACIÓN IRREVERSIBLE DE LA MALDAD HUMANA
– Judas 1:17-20
1. La tendencia para el mal crece absurdamente de una
generación a otra, es impredecible saber qué clase de mal van a cometer en el
futuro. No hay ciencia y ninguna
filosofía para reparar la sociedad actual, al menos que sea edificada en la santísima
fe.
2. La tendencia pecaminosa heredada, en lugar de ser
combatida y destruida, ella excede el límite practicado por los padres. Si los
padres han hecho el mal, la tendencia de los hijos es hacerlo peor. La solución
es esperar el regreso de Jesús, orando en el Espíritu Santo.
3. Tendencias para el mal, que se cultivó por los adultos
en el pasado, son abundantemente fructíferas en la vida de los niños de hoy;
¡imagínese, entonces, la siguiente generación! ¡Jesús viene pronto para
intervenir en la proliferación del mal! Sin duda, la saga del pecado está llegando
a su fin.
III. LA PRUEBA DE TAN GRANDE DEGRADACIÓN HUMANA ESTÁ EN EL
HECHO DE QUE CUESTA TANTO PARA EL PECADOR REGRESAR PARA DIOS – Judas 1:20-21
1. Para caerse en el pecado basta un momento, sin
embargo, volver a Dios requiere algo más que un momento, requiere toda una
vida. Además de santificarse en la santísima fe orando en el Espíritu Santo,
debemos guardarnos (permanecer) en el amor de Dios; ¡para ello se necesita
tiempo!
2. Para pecar sólo tienes que seguir la inclinación
natural del corazón, sin embargo, para santificarse exige la crucifixión
sobrenatural de la naturaleza carnal. Para obtener la vida eterna, debemos
morir para la vida temporal y nunca la resucitar.
3. Para caerse en el abismo que separa a los humanos del
Creador sólo un pensamiento pecaminoso ya basta, sin embargo, para hacerse
posible la restauración de los caídos fue necesaria la muerte del hijo de Dios.
Este primer acto de misericordia, hace que el cristiano espere el segundo gran
acto de la misericordia divina: ¡Cristo en Su segunda venida! Sólo así se
resuelve completamente la degradación en que toda la humanidad cayó cuando
pecó. ¡Ese día está cerca!
CONCLUSIÓN:
1. No hace falta decir que los últimos días están delante
de nosotros, ¡porque ya estamos en los tiempos finales! Es hora de prepararse
para vivir el último día aquí en la tierra y el primer día en el Cielo. ¡Cómo
creyentes esperamos el final de la saga del pecado!
2. ¡No tenemos que esperar a los últimos días, porque ya
han llegado! En estos últimos días debemos hacer un esfuerzo serio, para buscar
en Cristo la fuerza para vencer las tendencias naturales del corazón
pervertido, manchado con el pecado.
3. ¡No hay necesidad de declarar que los peligros de los
últimos días vendrán pronto, porque ya han llegado! Necesitamos que la espada
del Señor, que es Su Palabra, penetre hasta la médula del alma y los deseos,
apetitos y las pasiones de la carne; para que estemos preparados para
encontrarnos con nuestro Señor Jesucristo, que viene revestirnos de inmortalidad.
APELACIÓN:
1. Reconozca su necesidad real y acepte la ayuda que
Cristo ha provisto a todos al morir en la cruz del Calvario, El que prometió
volver a dar vida eterna a los fieles cristianos.
2. Que el poder de Cristo a través del Espíritu Santo,
extermine la semilla asesina del pecado en su corazón y le santifique para la
salvación.
3. Permanezca siempre conectado con Dios mediante la
oración y la meditación de Su Palabra para resistir a los efectos profanos del
amor propio y de la tentación a pecar.
Pr. Heber Toth Armí
Traducido por Elena Costa
Traducido por Elena Costa
No hay comentarios:
Publicar un comentario